Las primeras abejas espaciales
Elegidas por su inteligencia, c onvistas a la vida en otros planetas la NASA pensó en utilizar abejas , y así, disponer de productos apícolas y al mismo tiempo realizar una labor de polinización en las flores de los invernaderos espaciales. Pasamos a contar el vieja de estas valientes espaciales 3300 abejas y una abeja reina encapsulada, fueron introducidas en la lanzadera espacial Challenger en abril de 1984, junto a la tripulación de astronautas. El objetivo era comparar cuantitativamente el tamaño, la forma, volumen y estructura de la pared de los panales , es decir, cómo construyen las abejas los panales en ausencia de gravedad. Su espacio se limitaba a una pequeña caja. En la “ colmena espacial ” se colocaron junto a las abejas, dos cuadros de cera vacíos, y se alimentó desde dentro con una mezcla de agua, sacarosa y agar (para que la mezcla agua-sacarosa fuera semisólida). Resultados : Las abejas sobrevivieron al lanzamiento aprendieron a volar en condi